Hubo agua en varias zonas de Marte

Por: Ariel Palazzesi

Finalmente, se supo: gracias a los datos obtenidos por la sonda “Mars Reconnaissance Orbiter”, que detectó silicatos hidratados, un tipo de minerales asociados a la presencia de gran cantidad de agua, se ha determinado que este liquido fue muy abundante en el pasado.

Reconstrucción 3D de la zona.

La “Mars Reconnaissance Orbiter”’ (o MRO), en órbita alrededor del planeta rojo, ha recogido datos que han permitido a los científicos a cargo de la misión determinar que hace unos pocos millones de años existía agua en abundancia en Marte. Los datos, obtenidos por un instrumento denominado “Espectrómetro de Imagimática de Reconocimiento Compacto de Marte” (o CRISM), revela la existencia de mucha más variedad de minerales de lo que hasta ahora se creía.

En particular, se han detectado un tipo de mineral conocido como “silicato hidratado”, o “filosilicatos”, cuya mayor virtud es que permiten conservar un registro de la forma en que el agua a interactuado con las rocas en el pasado.

Marte no siempre fue rojo.

John Mustard, de la Universidad de Brown, es quien ha estado a cargo del análisis y de la interpretación de los datos, y ha publicada sus resultados en la revista «Nature». Básicamente, el comunicado puede resumirse en que se han hallado elementos que permiten suponer, con escaso margen de error, la existencia de procesos hidrológicos activos en épocas tempranas del planeta.

Estos procesos han tenido lugar a través de toda la corteza y la superficie de Marte. Mustard y su equipo aseguran que grandes zonas altas, ubicadas al sur del planeta, han estado cubiertas de agua en el pasado.  Hablamos de una era geológica temprana, con una antigüedad de entre 4.600 y 3.800 millones de años. Los científicos han denominado esta era como “Noachian”.

Asi era Marte hace millones de años.

El tema es que, a pesar de que la Phoenix Mars Lander había acaparado toda la atención de la prensa, desde su llegada a Marte hasta el descubrimiento de pequeñas partículas de hielo, pasando por los problemas a bordo, fue la MRO quien proporcionó, hasta ahora, los datos de mayor interés.

Las regiones que se ha comprobado que fueron ricas en agua incluyen al cráter “Jezero”, que en realidad pudo haber sido un lago. “De haber existido algún tipo de microorganismo en Marte, este tipo de ambiente hubiese sido ideal para su supervivencia», aseguran los científicos.

Encuentran vida en la estratosfera

Por: Kir Ortiz

Científicos de la India capturan microorganismos que viven en la parte alta de la atmósfera pero que no existen en la superficie del planeta. Son 3 bacterias desconocidas que hacen pensar en la lejana posibilidad de que nos encontremos ante organismos extraterrestres, en el sentido estricto de la palabra. Se han cercionado de manera muy rigurosa de que estos entes orgánicos no pertenecen a la fauna microscópica habitual del planeta, aunque hay que decir que no tienen dientes ni son de color verde. Se trata de especies nuevas pero de ADN conocido. Tranquilos.

Globo donde han cargado el material científico de recogida de muestras

Un grupo de investigación hindú lleva desde el 2001 realizando este tipo de observaciones con resultados positivos pero no ha sido hasta ahora, cuando han vuelto a replicar el experimento, cuando se han decidido publicar los resultados una vez se han asegurado el rigor necesario para poder declarar que lo encontrado no ofrece lugar a dudas. Se trata de 3 nuevas especies de bacterias que no se encuentran en la Tierra y que exhiben una alta resistencia a la radiación ultravioleta. No podía ser de otra manera porque a tan elevada altura la protección de la atmósfera ante los UVA es mínima. Una de las especies ha sido bautizada con el nombre de Janibacter hoylei, en honor del distinguido Astrofísico Fred Hoyle, la segunda Bacillis isronensis reconociendo la contribución de ISRO en el experimento de globo que llevó al descubrimiento y la tercera Bacillus aryabhata por el célebre antiguo astrónomo indio Aryabhata y también por el primer satélite de ISRO. Este esfuerzo multi-institucional contó con Jayant Narlikar del Centro Interuniversitario para Astronomía y Astrofísica en Pune como Investigador Principal y a los veteranos científicos U. R. Rao de ISRO y P.M. Bhargava de Anvesha apoyando como mentores del experimento. S. Shivaji del CCMB y Yogesh Shouche de NCCS fueron los expertos en biología y Ravi Machanda de TIFR estuvo a cargo de la instalación del globo. C.B.S. Dutt fue el Director del Proyecto de ISRO que estuvo a cargo de la preparación y operación de la compleja carga.

Se han encontrado 3 tipos de bacteria que no existen en la Tierra

¿Cómo se realizó el experimento? Desde la Instalación Nacional de Globos de Hyderabad, usada por Instituto Tata de Investigación Fundamental (TIFR) se lanzó un globo de 2.7 millones de pies cúbicos y con una carga útil de 459 kilos sumergida en 38 kilogramos de neón líquido. La carga consistía en un sistema de muestras criogénicas que contenía 16 sondas de acero inoxidable esterilizadas. Durante el vuelo, las sondas permanecieron inmersas en el neón líquido para crear un efecto de bomba criogénica. Estos cilindros, tras recolectar muestras de aire de distintas alturas (entre los 20 y 41 kilómetros) fueron enviados en un paracaídas de vuelta y recuperados con protocolos de alta seguridad para evitar contaminaciones. Estas muestras fueron analizadas por científicos del Centro de Biología Celular y Molecular en Hyderabad así como en el Centro Nacional de Ciencia Celular (NCSS) en Pune, para un examen independiente, asegurando que ambos laboratorios seguían protocolos similares para lograr una homogeneidad en el procedimiento y la interpretación. Realmente se ha puesto mucho empeño en conseguir un rigor extremo para lograr que las muestras se mantengan puras y que las observaciones no lleven a engaño.

Quizá haya bacterias similares en otros lugares del espacio

¿Cuáles fueron los resultados? En todas, se detectaron 12 colonias bacterianas y 6 fúngicas (hongos), basadas en 165 secuencias genéticas de ARN, mostraron una similitud mayor del 98% con las especies conocidas de la Tierra. Tres de las colonias bacterianas, a saber, PVAS-1, B3 W22 y B8 W22 eran, no obstante, especies totalmente nuevas. Las 3 especies recientemente identificadas poseían una resistencia de modo significativamente mayor al UV en comparación con sus vecinos filogenéticos más cercanos. De las anteriores, PVAS-1, identificada como miembro del género Janibacter, ha sido llamada Janibacter hoylei. sp. nov. La segunda especie B3 W22 se llamó Bacillus isronensis sp.nov. y la tercera especie B8 W22 Bacillus arybhata.

Las medidas y controles de precaución tomadas en este experimento permiten confiar en que estas nuevas especies se han tomado en la estratosfera y no de cualquier otra parte de la Tierra. Aunque el actual estudio no establece de forma concluyente el origen extraterrestre de estos microorganismos, proporciona un estímulo positivo para continuar el trabajo en la búsqueda por explorar el origen de la vida. No sería tan extraño pensar que alguna vez esas bacterias llegaron a la Tierra transportadas por algún meteorito. Sabemos poco de cómo se comporta la vida en condiciones extremas y en este caso, la naturaleza nos acaba de dar una lección mostrándonos organismos capaces de sobrevivir en una zona realmente difícil. Quien sabe si algún tipo de vida similar a la encontrada pudiera estar ahora mismo viviendo tan a gusto en alguna luna de Júpiter o en algún planeta cercano, como Marte o Venus.

Eyes on Earth 3D: Satélites en tu navegador

Por: Tomás García

Eyes on Earth 3D es una aplicación desarrollada por una división de NASA para ver la Tierra desde la perspectiva de 15 satélites. Este programa se ejecuta desde tu navegador así que no hay que instalar nada más que un plugin. Dos de los aspectos más interesantes de Eyes on Earth es que puedes ver los satélites en tiempo real y leer datos detallados sobre el propósito de cada uno. ¡Bravo NASA!

Justo hablábamos de la NASA hace pocos días, porque unos muchachos españoles habían logrado fotografiar la estratosfera terrestre utilizando no más que un globo y una cámara fotográfica. Esto no tiene mucho que ver con ese suceso, pero hay que seguir promoviendo semejante acontecimiento. Ahora es el turno de NASA, que al parecer está intentando compartir su enorme conocimiento con simples mortales como nosotros. O por lo menos ese es el propósito de Eyes on Earth 3D.

Eyes on Earth 3D es un medioambiente virtual creado por la NASA para que cualquiera pueda, desde su navegador, ver la tierra desde los satélites que giran alrededor de ella. Utilizando una tecnología similar a la que se usa para desarrollar videojuegos, programadores de la NASA desarrollaron este escenario 3D donde el usuario puede visitar 15 satélites de observación en tiempo real.

Puedes ver la trayectoria de los satélites en tiempo real.

Tenemos una enorme flota de satélites que están monitoreando el planeta. Pero no fue hace mucho, cuando buscabas cambio global en Google y no aparecíamos hasta la página 10.” Estas son las palabras de Kevin Hussey, director del departamento de desarrollo y aplicaciones en la tecnología visual, en JPL (Jet Propulsion Laboratory de NASA).

El programa también incluye un juego llamado Metropolis. El objetivo es encontrar 10 ciudades importantes en la tierra borrando nubes de CO2 que envuelve a la tierra. El otro juego, llamado CASSIE, te permite volar a Saturno y sus lunas, donde puedes dibujar con laser sobre sus superficies.

No me malinterpretes, amo Google Earth. Me emociona hablar de él. Pero tiene sus limitaciones.”, expresa Hussey. Hasta cierto punto tiene razón. Google Earth es una enorme herramienta para ver la tierra, pero no permite visualizar los satélites que giran alrededor del globo y toman las imágenes que vemos. “Por supuesto que nuestros satélites son importantes para nosotros.”, dice mientras confirma que hay posibilidades de una asociación con Google. Según Hussey, no va a pasar mucho tiempo hasta que agreguen información climática en la aplicación de Google.

En total hay 15 satélites para ver.

Quien quiera jugar con este interesante aplicación solo deben entrar al sitio y esperar a que cargue. Seguramente te pedirá que instales un plugin llamado Unity Web Player, en caso de que quieras probar la aplicación tendrás que instalarlo. De todos modos, lo hace en pocos minutos y no hay ningún riesgo.

Así que si sumamos la enorme aplicación que tiene Google con toda la información que tiene NASA sobre la tierra, sus satélites y sus cambios climáticos, Google Earth se podría transformar en una enciclopedia terrestre virtual… o algo por el estilo.

GeoEye-1: Imágenes del satélite de Google

Por: Lisandro Pardo

Google Earth ha demostrado ser una herramienta maravillosa, que nos transporta a los lugares más recónditos del planeta con sólo un par de clics. El detalle de las imágenes es más que aceptable y la información disponible es cada vez mayor. Sin embargo, Google no se ha quedado dormido en sus laureles, y tiene planeado aumentar la resolución de las imágenes disponibles en Earth, gracias al satélite GeoEye-1, al que tiene acceso exclusivo. Si no nos crees, mira las imágenes por tí mismo: Son excelentes.

El satélite GeoEye-1 fue lanzado en septiembre pasado, y como detalle tiene en uno de los lados de su cohete el logo de Google. El monto que tuvo que desembolsar Google y la Agencia de Inteligencia Nacional Geoespacial fue más que interesante: Poco más de u$s 500 millones, tanto por el satélite como por las actualizaciones de las instalaciones en tierra. El satélite requirió cerca de cuatro meses de chequeos constantes para confirmar que todos sus sistemas eran funcionales, y así fue como Google anunció de forma oficial el inicio de las operaciones comerciales del satélite en febrero de este año.

Como ejemplos de la capacidad de este nuevo satélite, se han tomado maravillosas imágenes de diferentes lugares del mundo. El monte Fuji y las pirámides de Egipto apenas son dos de las tantas locaciones disponibles. La calidad máxima de imágen que puede tomar el GeoEye-1 es de un detalle de 41 centímetros, pero esta calidad está destinada solamente para el uso exclusivo del gobierno norteamericano. En cambio, Google puede utilizar en Google Earth imágenes con un detalle de 50 centímetros, diez menos del máximo disponible en satélites comerciales hasta la fecha.

Malpica de Bergantiños es una de las locaciones españolas disponibles con GeoEye-1
Lo mismo sucede con el aeropuerto y la ciudad de Barcelona

Para quienes acostumbran de forma frecuente viajar a través de Google Earth, es apenas una cuestión de tiempo que el GeoEye-1 comience a actualizar todas las imágenes disponibles, con otras de mayor resolución. Ver las imágenes del GeoEye-1 es muy fácil, sólo debes ir a la página de Google Earth y tener instalado el plugin para ver Google Earth a través del navegador, o descargar el archivo KML que habilita el acceso de estas fotos a través de una instalación local de Google Earth (doble clic al archivo, y eso será todo). Una mejora que los usuarios del Google Earth, de ninguna forma se pueden perder.

Científicos ensayan colonización marciana

Por: Kir Ortiz

Si se consigue hacer que la vida se mantenga en Marte, el siguiente paso está cantado. Una vez instalada la flora necesaria se creará una atmósfera respirable y una temperatura soportable para el hombre. Este es el proyecto de un grupo de científicos que pretenden convertir el Planeta Rojo en otro un poquito mas verde. Lamentablemente el tiempo que necesitaría la idea para llevarse a cabo no da para que lo podamos ver nosotros.

Marte se ve precioso en foto pero de cerca no es tan acogedor

Marte se percibe muy bonito cuando lo miramos al telescopio o cuando lo observamos en las fotos de la NASA, sin embargo, la realidad del planeta rojo es bien distinta. La temperatura de la superficie ronda los 50 grados  bajo cero, apenas hay agua y la que posee se mantiene congelada en los polos. Además, la gravedad se cifra en un tercio de la terrestre. Con este panorama el ser humano lo tiene complicado para establecerse allí. Sin embargo, un equipo de científicos de México y USA dice tener la solución. Especulan que la plantación de una flora específica que resista las especiales condiciones de Marte llevaría a una modificación sustancial del entorno climático del Planeta Rojo. Tanto que sería posible aumentar la temperatura hasta unos aceptables 7 grados y, sobre todo, crear una atmósfera respirable, llena de oxígeno y del resto de gases necesarios para la vida humana. Analizamos en detalle el propósito del proyecto, que se podría realizar en tres fases.

1ª Fase

La intención es aumentar la temperatura superficial del planeta, para lo cual es preciso liberar gases que generen un potente efecto invernadero que ayudarán a atrapar en la atmósfera marciana la radiación infrarroja proveniente del Sol y calentar el planeta.  Como hay agua congelada en los polos y en el subsuelo, se calcula que necesitarán cerca de 100 años para que la temperatura sea lo suficientemente alta para que los inmensos cuerpos de hielo se derritan, y formen nuevamente los océanos que había hace cerca de cuatro mil millones de años.

Inyectar gases de efecto invernadero para fijar la radiación infrarroja

2ª Fase

Introducir bacterias para que realicen la fotosíntesis y generar oxígeno empezando a rodar así el ciclo de la vida. Deben ser unas bacterias muy especiales capaces de soportar las duras condiciones que existen allí, pero los científicos aseguran que tenemos ejemplares de suficiente resistencia como para instalarse cómodamente en la superficie del Planeta Rojo.

Depositar bacterias extremófilas que puedan sobrevivir en Marte

3ª Fase

Una vez establecida una climatología básica, entrarían en escena las forestas terrestres, en forma de árboles y arbustos que, una vez plantados allí, conseguirían acelerar el cambio y convertir la atmósfera en respirable para los seres humanos. Quedaría como un idílico lugar de cálidos valles, llenos de bosques y extensos cuerpos de agua.

Plantar árboles que aguantarán a 7 grados en la superficie marciana

Esto precisamente es lo que intentan simular los científicos de la NASA, la UNAM y la Universidad de Lousiana, pues están usando unas instalaciones en un volcán llamado el Pico de Orizaba, en Veracruz, para realizar los experimentos. El único científico mexicano de la UNAM en este proyecto, Rafael Navarro González, explicó que en el Pico de Orizaba han encontrado un entorno similar de lo que podría adaptarse en Marte, por lo que desde hace más de dos años plantaron mil diferentes árboles a 4.500 metros de altitud, para analizar la tasa de supervivencia y qué tipo de especies podrían adaptarse a la posible atmósfera marciana. En este volcán la temperatura anual promedio es de 7  grados centígrados, la misma que esperan haya en Marte cuando se caliente, por lo que el Pico de Orizaba representa la base para luego trasladar los estudios al Planeta Rojo.

En el volcán del Pico de Orizaba se realizan las simulaciones

La hipótesis de los expertos es que la fijación del nitrógeno será crucial en la última etapa, ya que las plantas necesitan de este elemento para sobrevivir. A pesar de que se encuentra en el aire y en el suelo, la mayoría de ellas no puede asimilarlo por si mismas y se valen de las bacterias.  Según sus teorías, el límite de altitud donde dejan de crecer los árboles marca también el hábitat de estos organismos microscópicos. Uno de los avances más importantes en 10 años de labor, ha sido lograr que sobrevivan árboles a una altura hasta ahora imposible en cualquier sitio del mundo, a 4.500 metros sobre el nivel del mar. “La gran sorpresa que nos llevamos fue la parte alta, que el grado de supervivencia pasando el invierno, fue de prácticamente el 75%”, declaró Rafael Navarro González.

A pesar de los avances, Navarro reconoció que dar vida al planeta rojo requiere de una inversión de muchos cientos de años, toda vez que no es un proceso sencillo, y para que un humano pueda vivir ahí deberán pasar al menos mil años, si se le da continuidad a este proyecto. Un cifra nada desdeñable, considerando que dentro de ese tiempo quizá ni siquiera estemos ya aquí. De todos modos, el proyecto, aunque puede tildarse de excesivamente lejano, permite estudiar en profundidad la reforestación en la propia Tierra y también ayuda a conocer mejor la vida y especular con mayor conocimiento de causa sobre el futuro de nuestra civilización.

Batería magnética revolucionaria

El futuro se presenta en forma de cambio de paradigma para las baterías. Hasta ahora, los sistemas de almacenamiento de electricidad mas comunes funcionaban de modo químico pero gracias a un grupo de científicos se han plantado las semillas de lo que podría ser una verdadera revolución: las baterías magnéticas. Con ellas dispondremos de energía rápida y duradera. Solo hay que esperar a que madure la tecnología para poder disponer de una auténtica revolución.

Representación gráfica de la estructura del dispositivo

Estamos tan habituados a las baterías actuales que hemos olvidado la idea de que se puede almacenar energía de otras maneras. Día tras día, las baterías aumentan su rendimiento y bajan su precio, pero mantienen algo inalterable: su proceso químico. Se cambian materiales, se aplican nanotecnologías, de optimizan reacciones y se estudian nuevas combinaciones de estos elementos, pero siempre en formato químico. Un grupo de investigación de la Universidad de Miami en coordinación con otro de la Universidad de Tokio y Tohoku, han publicado en la prestigiosa revista Nature un interesante trabajo que abre un nuevo campo de estudio en el mundo del almacenamiento energético. Demuestran que es posible construir una batería que utilice un spin magnético para cargarse, de modo parecido a como lo hacen los discos duros que tan conocidos nos resultan. Dicho sistema almacenaría energía solo con aplicarle un campo magnético, que luego puede extraerse de la misma manera, convirtiendo este sistema en un espléndido almacén de electricidad. El secreto de esta tecnología estriba en el uso de nano-imanes, que permiten aprovechar este efecto de “spin battery” para dejará atrás cualquier tipo de reacción química y prescinde también de cualquier parte móvil que pudieran tener las baterías tradicionales. Además, se prevee que se recarguen de modo casi instantáneo.

Los puntos blancos son los átomos y los circulos blancos los nano-imanes

El dispositivo que ha servido de experimento apenas tiene el tamaño de un cabello humano. Recordemos que estamos hablando de nanotecnología, pero el físico Stewart Barnes afirma que aunque la energía generada ahora mismo apenas ha sido suficiente para encender un pequeño LED, se han hecho cálculos que permiten especular que dentro de poco tiempo, ese mismo dispositivo proporcionará electricidad para mover un coche unos kilómetros. Si ampliamos el sistema al tamaño de una batería normal, el automóvil podría recorrer miles de kilómetros sin tener que recargar. Barnes afirma que las posibilidades de esta revolucionaria tecnología son infinitas y que llevarán a un cambio total en la concepción energética del mundo actual. Imaginen lo que podría hacerse con una batería microscópica que aguante varios días alimentando un dispositivo de tamaño considerable. O hasta donde podemos llegar a poco que aumentemos el tamaño de la batería. Realmente, esta tecnología promete. Las baterías químicas quizá estén llegando ya a su techo de rendimiento, sin embargo, las magnéticas solo han hecho que comenzar su andadura.

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Fotografían el espacio con un globo y una cámara

Con todos los millones de dólares que se gastan anualmente para tomar fotografías del espacio y cuerpos celeste, esta noticia aparece como una de esas hermosas ironías de la vida. Cuatro estudiantes españoles montaron una especie de nave, con un globo, un sensor y una cámara fotográfica para que tome imágenes de la estratosfera terrestre. Está de más decir que lo lograron y los resultados son increíbles y verdaderamente admirables.

Estamos acostumbrados a mostrar e informar sobre fotografías del espacio y cuerpos celestes que salen millones y millones de dólares. Los sueldos de los profesionales involucrados, el mantenimiento del equipo necesario y el equipo en sí, todo cuesta una cantidad astronómica de dinero. Es por eso que nos alegra tanto traerte esta noticia, en donde cuatro estudiantes españoles tomaron fotografías del espacio utilizando no más que una cámara y un globo.

Gerard Marull Paretas, Sergi Saballs Vila, Marta¬ Gasull Morcillo y Jaume Puigmiquel Casamort son cuatro estudiantes españoles de la escuela IES La Bisbal y han logrado algo simplemente impresionante. Con la ayuda de su profesor Jordi Fanals Oriol, montaron una cámara de €60.00, sobre un globo con un sensor para captar su posición. Este globo se elevó a 30.480 metros de altura y logró tomar fotografías bastante impresionantes.

El sensor construido por los estudiantes.
Viendo el progreso del proyecto desde los ordenadores.

Según uno de los integrantes, inflaron el globo con helio y pesaba alrededor de 1500 gramos. Con este peso fue capaz de cargar con el sensor y la cámara fotográfica de 1,5kg. Mientras ganaba altura pudieron medir su trayectoria utilizando sensores que se comunicaban con Google Earth. Gerard Marull, líder del proyecto dijo: “Estábamos abrumados por los resultados, especialmente por las fotografías. Enviar nuestra nave creada a mano al borde del espacio fue increíble.

El equipo encargado del proyecto tuvo que tener muchos factores externos en cuenta la mañana del lanzamiento. Gerard cuenta que lo lanzaron a las 9.10 de la mañana y el momento crucial fue asegurarse de que el globo lograba pasar los 10.000 metros, la altura donde vuelan los aviones comerciales. Debido a los cambios de presión atmosférica se esperaba que el globo se infle a un máximo de nueve metros y medio.

Una de las fotos tomadas por los estudiantes.

Finalmente llegó a los 30.480 metros de altura y comenzó a desinflarse. Los estudiantes viajaron 10 kilómetros para encontrar el sensor que aún estaba emitiendo su señal, a pesar de haber estado expuesto a condiciones extremas.

Realmente impresionante. Si te interesa puedes dirigirte a Flickr y ver el montaje que han hecho para mostrar el resto de las fotografías tomadas. ¿Qué más se puede decir sobre esta hazaña? La NASA podrá tener sus millones y alcanzar las profundidades del espacio con su grupo de miles de científicos… pero la satisfacción que deben sentir estos cuatro estudiantes por llevar a cabo semejante tarea con tan pocos recursos, debe ser inconmensurable.